Hoy te quiero contar una experiencia que viví en primera persona. Una noche viendo los estados de WhatsApp vi el de Marta. Con ella, compartimos un fin de semana en un taller de Yoga, y recuerdo que me cautivaron sus ganas, su luz y su pasión al explicarme lo que hacía.
En su estado de mensajería instantánea compartía un taller llamado “Mujeres de Fuego” que organizaba junto a otras colegas de coaching de alto impacto.
Enseguida me dije ¡quiero hacer esto! ¡Quiero vivir esta experiencia! Y no me equivoqué. Fue uno de los mejores momentos vividos en 2019. Me ayudó a aumentar mi autoconfianza, a vencer miedos, a creer que puedo hacer muchas más cosas de las que ya creía que podía hacer y sobre todo el significado de la palabra sororidad.
Esta palabra tan bonita implica la solidaridad entre mujeres, y la lucha por nuestro empoderamiento.
Pincha aquí para ver algunas fotos mías caminando por el fuego, rompiendo una tabla y quebrando una flecha con la garganta. ¡Aún me emociono al verlas!
Hablando de mujer empoderada, quiero presentarte a Marta Rodríguez . Ella trabaja como Coach, imparte formación y da conferencias. Es instructora de Alto Impacto y Firewalking.
¡Siéntate con comodidad y disfruta de la entrevista!
El alto impacto busca romper esquemas, sorprender, generar experiencias inolvidables y transformadoras que ayuden a las personas que lo experimentan a lograr cambios muy importantes, incluso verdaderas transformaciones.
El alto impacto empodera, te da fuerza, rompe barreras y te demuestra que eres capaz de lograr incluso retos que te parecían imposibles.
Podemos hablar de coaching de alto impacto, si estas técnicas son aplicadas en sesiones de coaching, o de formación de alto impacto, si lo incorporamos en cursos o talleres. En ambos se utiliza como una dinámica para reforzar lo que se esté trabajando en la sesión, ya sea individual o en equipo.
También podemos hablar de eventos o jornadas de alto impacto, donde estas actividades son parte protagonista en la jornada, normalmente orientadas a desarrollo personal. Se suelen realizar varias actividades de alto impacto en el día y todo va unido por un hilo conductor que lleva al participante a vivir una experiencia única e inolvidable.
Me gustaría también destacar lo que para mí NO ES. El alto impacto no es postureo, las dinámicas no se hacen porque sí, para entretener o para pasar un buen rato. El alto impacto es mucho más profundo, es una oportunidad para dejar atrás lastres que te están limitando e impulsarte con una energía renovada hacia aquello que quieres conseguir.
Hay muchas técnicas con las que podemos lograr impactar en las personas. Algunas están más orientadas a la conexión con uno mismo y otras en las que se trabaja también la conexión en parejas o equipos.
No hay disciplinas mejores o peores, dependerá de cuáles puedan ser más adecuadas en función de lo que queramos conseguir.
Sí me gustaría contarte algunas de las técnicas de alto impacto que más usamos:
No es lo mismo leerlo que vivirlo, por eso yo animo a cualquier persona que sienta que tiene miedos o barreras que le están limitando, que lo pruebe para descubrir los beneficios de estas dinámicas al experimentarlas por sí misma.
Las personas se encuentran con experiencias que “atentan” contra creencias tan profundas que se dan cuenta de que son capaces de conseguir hasta lo que creían imposible.
Además, estas experiencias está probado que generan nuevas conexiones neuronales que nos ayudarán a tener más recursos para afrontar futuras situaciones que nos generen miedo o ante las que podamos sentir inseguridad. Nuestro cerebro dispondrá de nuevos “caminos” a los que recurrir para que superemos mejor esas situaciones.
Yo trabajo sobre todo en el ámbito corporativo y para mí es una herramienta potentísima. Orientamos la intervención al logro de los nuevos objetivos de la organización o a la superación de momentos determinados que estén viviendo o que van a vivir y, desde ahí, trabajamos la excelencia, el empoderamiento, la orientación al logro, el trabajo en equipo, sentimiento de pertenencia, aquello que, junto con la Dirección, identifiquemos que va a ser más valioso para cada equipo en concreto.
Son experiencias tan fuertes y significativas que no solamente tienen impacto en ese día, sino que esos equipos quedan unidos por esa vivencia que han tenido juntos, pasa a ser parte de su código interno.
De hecho, muchos de mis clientes me han dicho que en sus reuniones internas hacen referencia a ello como lema de empoderamiento: “si pudimos caminar sobre cristales podemos hacer esto!”.
Me gustaría destacar, ya que no lo he hecho aún, que este tipo de dinámicas deben contratarse siempre a profesionales certificados y entrenados para garantizar la seguridad de los participantes. Los instructores formados por el Firewalk Institute of Research and Education tenemos el lema de las “3 S”: Safe, Safer, Safest (Seguro, Segurísimo, Súper Seguro) y esto es para nosotros la base de cualquier intervención de alto impacto.
Creo que ya he ido contestando a esta pregunta en los puntos anteriores, pero aprovecho para volver a destacar que con el alto impacto las personas pueden lograr auténticas transformaciones, pueden romper con miedos que les paralizaban, que les limitaban y que no les dejaban brillar todo lo que podían.
Son experiencias que te conectan contigo mismo y que te permiten demostrarte que, si quieres, puedes lograr todo aquello que te propongas.
En mi experiencia también he visto que se generan conexiones preciosas con otras personas. Vivir estas experiencias con familiares o amigos o cualquier persona especial para ti es muy emocionante. Por ejemplo, yo he presenciado a madres e hijas vivir juntas dinámicas de alto impacto y el amor y el orgullo que desprendían era algo absolutamente increíble.
De nuevo, la mejor manera de entenderlo es viviéndolo. Muchas veces es difícil poner en palabras la energía y el ambiente que se genera en este tipo de dinámicas y eventos.
Gracias Marta por compartir tu saber hacer en mi blog con quienes leen mis contenidos y gracias a ti que has llegado al final de este artículo.