Da un paso adelante y prepárate para tu reinvención profesional. Ámate y ama la forma en la que trabajas. Solo con amor podrás disfrutar del camino aunque aparezcan los obstáculos.
Según Mario Alonso Puig «Reinventarse es aflorar la grandeza de tu interior cuando más lo necesitas».
De tu actitud depende que consigas cambiar de trabajo, mejorar profesionalmente, atraer clientes con tu emprendimiento o cualquier otra meta que te propongas.
No te estoy diciendo que emprendas o que dejes tu trabajo actual, sino que descubras quién eres, qué te diferencia del resto de los profesionales de tu sector, que aprendas a sacarte partido, es decir a ponerte en valor.
Es muy pretencioso querer aumentar tus ingresos si no valoras lo que haces. Desde el momento que dejas de apostar por ti, bajan tus fuerzas, disminuye tu autoestima y eres incapaz de dar lo mejor de ti profesionalmente.
¿Te imaginas hacer lo que te gusta? Me dirás ¡claro que si Laura! pero no sé por dónde comenzar.
Descubrir tus talentos, tus habilidades, tus capacidades, en definitiva, para qué eres bueno y cómo puedes aportar tu valor a los demás, es el principio.
Personalmente me tuvieron que despedir para que tuviera las agallas de tomar el control de mi vida. Para serte sincera tuve que pasar por una depresión para tener el valor de reinventarme y descubrir mis verdaderos talentos.
Corría septiembre de 2011, fue un viernes a las 15 hs (creo que es la hora y el día en el que se producen los despidos, al menos aquí en España) me entregaron el finiquito. Tenía el cumpleaños número cuarenta de un amigo, por lo que firmé el acuse de recibo conforme y corrí a evadirme de mi realidad.
Lo duro llegó el lunes, cuando levantarme para ir a trabajar no era prioridad y no sabía por donde comenzar a buscar trabajo o qué hacer con mi vida. Largas colas en el INEM a causa de la crisis laboral era lo común por esas épocas, y nueve años atrás se repite esta situación.
Tuve que pensar seriamente qué hacer y tras hundirme en una larga tristeza, buscar ayuda profesional para cambiar mi actitud hacia la vida y comenzar nuevamente a elegirme.
Desterrar pensamientos negativos y enfocarme en cómo ayudar a los demás hizo que me lanzara a estudiar marketing digital y especializarme en marca personal.
Tras 8 años como consultora, creo que todas las marcas tienen una personalidad única. Una forma genuina de comunicar, de enamorar y emocionar a sus clientes con sus textos y así conseguir vender con autenticidad.
Si me permites una sugerencia, elimina tu ruido mental y cambia de actitud. Y si no puedes solo, pide ayuda. De esta forma conseguirás que tu marca personal sea más rentable.
Me ha fascinado ver este vídeo donde la alpinista Edurne Pasaban cuenta los aprendizajes que le ha traído realizar 14 cumbres. Su actitud y pasión hacia su deporte ha permitido que brille con luz propia, incluso en sus momentos de máxima oscuridad.
En el vídeo ella propone:
Estoy totalmente de acuerdo con su visión, dale al play y descubre más sobre la importancia de la actitud para conseguir resultados con tu marca personal.
Puedes elegir moldear intencionalmente esa actitud o permitir que se moldee por lo que dejas de hacer.
No existe una actitud buena o mala, simplemente es. Poner foco en tu actitud es importante para que tu futuro laboral será exitoso.
Las personas somos un conjunto complejo de pasiones, motivaciones, impulsos, metas, experiencias, pensamientos y emociones. No hay forma de que puedas transmitir tu forma personal de manera auténtica sin una actitud correcta.
El mundo online y offline está lleno de personas que quieren ser como los demás. Profesionales que quieren ser reconocidos y se olvidan de ser ellos mismos porque desconocen su valor diferencial.
Si realmente quieres brillar, debes descubrir aquello que está dentro de ti, esa perla que te hace especial.
Ya sé me dirás que es difícil, que no tienes nada de diferente, que no sabes cómo comunicarlo, que lleva mucho trabajo, que te falta tiempo, que no es el momento, que te faltan ganas, que temes al futuro incierto que se viene y un largo etcétera. La respuesta a todas estas cuestiones es una sola: Con tu actitud no estás dando prioridad a lo que realmente importa, TÚ.
Cambiar tu actitud para ponerte en valor hará que te valoren, que consigas aumentar tus ingresos, que logres atraer a los reclutadores a tu perfil, que te consagres como referente de un sector ¿merece la pena invertir en tu desarrollo de marca o vas a seguir como estás? Sin ganas, con poca actitud y siendo egoísta por no compartir con el mundo aquello que sabes hacer mejor que nadie, pero no te animas a compartir o ni siquiera has descubierto que sabes.
Dicho esto, demos un paso más ¿cuáles son las tres cosas que desearías que el resto de las personas recuerden el día de tu funeral sobre tu vida?
Si esas cosas son importantes úsalas para moldear tu actitud de marca personal.
Hace unos días le hice esta pregunta a una clienta en una sesión de consultoría y ella me respondió que quería comunicar su gran devoción familiar, respeto y reconocimiento de sus ancestros inmigrantes.
También quería ser percibida como alguien sedienta de nuevos conocimientos y su afán de compartirlos con los demás.
Desarrollar una marca personal con mi metodología lleva 8 horas, pero lógicamente como todo aprendizaje requiere de tu actitud para poder asentar lo aprendido y de esta forma conseguir rentabilizar tu marca personal.
Necesitas actitud para reconocer cómo quieres sonar y ver cómo lo perciben los demás.
A medida que te enfoques en ti mismo, en tu valor personal, emergerá tu actitud de manera genuina.