Reconoces estas marcas de inmediato por sus campañas publicitarias, sus mensajes en redes sociales, por su imagen visual y textual, es decir por su forma única de comunicar.
Estoy segura de que unas te atraen más que otras. Esto se debe a que conectas con lo que te hacen sentir, siendo fácilmente reconocibles.
Hablando de marcas personales que tienen un negocio digital, fíjate en estos ejemplos de tres mujeres con personalidad bien diferenciada. Cada una con su estilo y su forma peculiar de hacer y decir las cosas.
Charo “Charuca” es la reina de la papelterapia, con sus agendas mueve a sus jefas a mantenerse organizadas, inspiradas y llenas de energía. Su tono es empoderado y realista.
Alma “LaForte” comunica entre risas en su patio de vecinas. Saluda en su podcast y redes con su clásico ¡Hola, tías! Se define como perioartista, mitad periodista, mitad artista. Lo más inteligente de ella es que sabe reírse de sí misma en su día a día y en sus ratos libres malcría con amor a su perro Baicon. Su tono es cercano y humorístico.
Ana Albiol lleva la comunicación en vena. Colgó las brochas y se reinventó gracias a varias crisis personales que la ayudaron a parir dos libros. Comparte mensajes con su vaca icónica, su bata de gueparda, vende su glow efecto isla y lo peta hasta el punto de que tras varios lotes algunas aún no nos hemos podido hacer con él. Su tono es cercano y natural.
¿Qué las diferencia? Como ves su personalidad de marca y el tono que utilizan.
Toma buena nota porque en este artículo te enseñaré cómo enamorar a tu cliente ideal con tu voz de marca.
Para transmitir un mensaje que conecte con tu cliente ideal utiliza tus propias palabras sin miedo.
Tu forma de hablar, los términos que utilizas y la manera en que lo haces te ayudan a definirte como marca personal y negocio digital.
Cada marca tiene un tono diferente, una diferente melodía que la hace sonar de manera única, especial y la convierte en inigualable.
¿Te gustaría que sientan de que te conocen de toda la vida? O que te digan ¡eres igual en las redes que en persona! Creo que el segundo es el mejor piropo que me pueden decir al desvirtualizar.
Te pregunto ¿Alguna vez te has puesto a pensar lo que transmites con tus palabras?
¿Cómo se siente quien navega por tu sitio web? ¿Qué percibe quien lee los contenidos de tu blog o redes sociales?
Supongo que lejos de vomitar contenidos, quieres conectar con tus potenciales clientes de manera real sin comparaciones.
Para ello es necesario de que encuentres tu propio estilo al comunicarte con ellos.
Que no es lo mismo que estratégicamente natural. No existe estrategia que valga para que alguien que no lo es, se vea natural. Pero si existen estrategias para que alguien que actúa desde su verdad cale en el corazón de su audiencia.
Si me permites un consejo, evita contenerte de utilizar expresiones que pienses que pueden caerle mal a quien te lee o escucha. Estarás de acuerdo conmigo en que no podemos gustarle a todo el mundo, ni debemos.
Es probable que quien lea en mi web que hago yoga, que medito y que tengo la intuición a flor de piel piense, como dice Borja Vilaseca, que soy “una hierbas”.
Sin embargo, gracias a manifestar en mi escaparate digital y en mis redes sociales que me apasionan estas dos actividades y que percibo a través de una conexión inmediata lo que mi cliente quiere transmitir, atraigo a personas y marcas con las que comparto valores a fines, me gusta compartir y trabajar.
Así, abrí la puerta a personas y marcas interesadas en el desarrollo personal, coaching, psicólogas, terapeutas, etc. que quieren transmitir con amor y emoción quienes son. Marcas con valores con las que es una pasada trabajar, y es más fácil hacerlo porque congeniamos desde el minuto cero.
Por ello, te invito a revisar tus creencias y dejar de reprimir aquello que pienses que no puede gustarle a los demás. Busca con qué palabras y actividades sientes comodidad de mostrarte y ¡hazlo sin más!
La voz es la manera en la que se transmite la personalidad de tu marca. Esta se forma a través de lo que dices, cómo lo dices y cómo la muestras. Así, defines el tono de tus mensajes y cómo quieres que tu público objetivo te perciba.
¿Quieres generar engagement?
¿Necesitas informar algo?
¿Precisas educar?
¿Te apetece entretener? o
¿Buscas vender?
Como ves hay varios propósitos, eres tú quien elige cuál usar en cada momento.
Los tonos son:
Tu tono de voz ha de ser siempre el mismo en los artículos que publicas, en las respuestas a comentarios y correos electrónicos, en las charlas cara a cara, en las conferencias que impartas y en tu web.
Así conseguirás que haya una coherencia comunicacional al expresarte en todos los medios que decidas tener presencia con tu marca.
Si sueles hacer bromas, hazlas en tu web y en tus redes. Si eres amorosa, selo con las palabras que elijas para comunicar.
Si te muestras como no eres, lo único que conseguirás es que tu público objetivo desconecte, no te lea hasta el final y se marche. Se sentirá confundido si en un sitio bromeas y en otro transmites más seriedad que guardia real.
Es importante que además de tener en cuenta el propósito de la comunicación, a quien te diriges y cómo quieres que se sienta tras pasar por tu feed, blog o web.
Si tu marca es comercial ¿Qué personaje sería? ¿Te la imaginas discreta o cotilla? ¿Cómo hablaría? ¿Su voz sería fina o gruesa? ¿Infantil, adolescente o madura? ¿Con algún acento en particular?
Fíjate en Cruzcampo una cerveza con mucho acento, que lo transmite así:
Y tú ¿Has encontrado tu voz de marca o te falta hacer algunos retoques? Te ayudo a comunicar siendo tú sin comparaciones. Te acompaño aquí.